Para nosotras estas tortitas son muy especiales, son un claro reflejo de lo que queremos transmitir. Fue una de las primeras recetas que Claudia tuvo que idear para lidiar con muchas de sus intolerancias y para poder seguir disfrutando de un bocado «dulce». Aunque Marina siempre se mostraba reacia a probar sus «inventos saludables», este pudo con ella, abriendo las puertas a otros muchos que vinieron detrás. Y ahora estas tortitas forman parte del día a día de ambas.
Ingredientes simples y saludables, pero sin renunciar al placer y disfrute. Avena, plátano y leche vegetal. Así empezaron y así se podrían quedar. Aunque hemos ido mejorando la receta poco a poco y también la probamos con huevo, lo que le da un extra de «esponjosidad».
Estas tortitas siempre estarán en nuestra carta. Pero si no se compartieran las recetas, los seres humanos no hubiésemos llegado a donde hemos llegado. Por lo que no sólo la compartimos, sino que os animamos a que forme parte de vuestro recetario habitual. Porque algo así no os lo podéis perder.